Esta semana tuve el gusto de charlar con Leonor Reyes, periodista de Arena Pública, sobre las tensiones que algunos proyectos de IA de la corporación norteamericana Meta podrían implicar sobre la privacidad y la protección de los datos personales de los usuarios a nivel mundial. Específicamente, discutimos sobre la iniciativa de IA “Persona”, que podría ser lanzada en setiembre próximo, y que está generando todo tipo de cuestionamiento sobre cómo Meta gestionará tecnológica y legalmente los datos personales. Hace unas horas salió publicada en Arena Pública la nota sobre “Chatbots de IA personalizados: ¿Vienen nuevos desafíos de privacidad para Meta?“.
“… estos chatbots, apodados internamente como “personas”, adoptarán la forma de diversos personajes, como Abraham Lincoln, ejemplo que se ha explorado en el desarrollo de personajes. Además, también podrían proporcionar nuevas funciones de búsqueda, ofreciendo recomendaciones y proporcionando entretenimiento interactivo. … El objetivo de la empresa es aumentar la interacción en sus plataformas de redes sociales para mantener y atraer a usuarios aprovechando una herramienta que ha cautivado las personas, tal como ocurrió con ChatGPT, de Open AI, que tardó menos de cinco días en llegar a un millón de usuarios, un récord entre los fenómenos tecnológicos. … Pero justamente la retención de los usuarios pone a Meta en medio de un dilema no solamente ético, sino también dentro de una discusión que afronta temas de salud psicológica y psicofísica.”
Durante la entrevista recordamos el caso Facebook / Cambridge Analytica y como Meta es reconocida por el destrato que realiza sobre los datos personales de los usuarios (algunos países han, incluso, prohibido sus servicios y hasta en Rusia es considerada una corporación terrorista). Al respecto también se puede revisar el artículo “El extractivismo de grandes datos (personales) y las tensiones jurídico-políticas y tecnológicas vinculadas al voto secreto“.