Miles y miles de usuarios de Twitter, la red social norteamericana de microblogging, se expresaron contra los ltimos cambios en las condiciones del servicio. A medida que esta plataforma se expande a nivel mundial, inevitablemente comienzan los problemas para respetar la libertad de expresin o, peor an, ocultar las sofisticadas formas de censura. Lo cierto es que, al igual que Google Inc. o Facebook, ahora Twitter tambin traiciona sus postulados fundamentales a nivel global.
El 26 de enero Twitter inform a sus clientes un profundo y repentino cambio en las condiciones de uso de sus servicios. En concreto, informaron a travs de su blog (ampliado el 27 de enero) que estaban en condiciones tecnolgicas de segmentar la gestin corporativa de la libertad de expresin de sus usuarios de acuerdo a las realidades legales, polticas, histricas y culturales de cada pas.
La estructura del comunicado y, sobre todo, de la solucin propuesta desde Twitter es arbitraria e insustancial. Argumentan que, hasta el momento, la nica forma de lidiar corporativamente con las diversas formas que puede adoptar la libertad de expresin era remover contenidos globalmente. Para evitar ello, lejos de dar batalla contra la censura, desde Twitter proponen una solucin tecnolgica que busca retener (withheld) mensajes o cuentas de usuarios en cada pas.
La posicin ideolgico-poltica de Twitter es sorprendente. Entienden que estn evitando el mal mayor de la censura global gracias a haber implementado un sistema tecnolgico interno que permitira la censura pero slo en cada uno de los pases. Adems, para ganar transparencia, la empresa comunic que est ampliando su asociacin con Chilling Effects, un sistema de monitoreo va web donde podran alojarse por pases los supuestos casos controvertidos.
Ahora bien, quin decide qu se publica o qu se retiene? Desde la empresa afirman que en cada pas slo van a retener contenidos o cuentas a pedido de una instancia legal vlida. Es decir, desde Twitter sostienen que no bloquearn usuarios, mensajes, enlaces o contenidos en general y por propia voluntad, sino que, slo darn curso reactivamente a los pedidos que les soliciten otros clientes, Estados o terceros interesados.
En vez de habilitar las instancias judiciales internacionales, Twitter se arrog la potestad de disear un sistema donde va a evaluar administrativamente qu va y qu no va dentro de la red social. S, es cierto, ser a pedido de algunos interesados, pero ser finalmente la empresa la que decidir si esos contenidos pueden o no mostrarse dentro de cada pas. La propuesta es, ni ms ni menos, una solucin tecnolgico-jurdica para permitir la gestin de la censura a nivel nacional e internacional.
Qu es peor, una censura visiblemente bruta, grotesca y desmedida o una censura silenciosamente sofisticada, inteligente y sutil? Es inslito que Twitter alegue el respeto de las leyes locales para censurar. Acaso Twitter no violaba hace un ao las leyes internas de Egipto, Tnez, Libia, Siria y otros pases rabes cuando Estados Unidos y las fuerzas de la OTAN reconectaban las redes sociales en medio de las revueltas? Qu respetaba Twitter en estos casos?
El doble estndar de Twitter y muchas otras corporaciones de norteamericanas sobre la libertad de expresin apesta. A Twitter le importa mucho ms la venta de publicidad alrededor del mundo que la defensa de las libertades de expresin. Al parecer, algunos negocios a nivel global se hacen ms all de los derechos humanos. Es claro, estos cambios jurdico-tecnolgicos posicionan a Twitter como uno de los ms grandes censores a nivel mundial.
* El Dr. Ariel Vercelli es Presidente de BIENES COMUNES A. C. e Investigador del CONICET / IEC-UNQ. Columna publicada en la seccin de Tecnologa de Tlam. Sin licencia.